Quesque la moraleja de la semana
-de una semana llena de esas noticias
que a cualquiera desaniman-
fue que vivir ya no es negocio.
Después de algunos tragos,
morir tampoco lo es,
(eso de los cajones,
las ceremonias y las lágrimas
suena a números negativos)
¿entonces?
...
¿Pero yo de qué me preocupo?
si de cualquier forma
soy re mala pa los negocios...
(lo cual no resta fuerza a mi afirmación
de que el capitalismo a nadie le conviene)
:/
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